martes, 7 de mayo de 2013

Crimen y castigo por Avelino Noel Sierra.

JUAN BAUTISTA BAIROLETTO.
Ocurrió en 1928 cerca de Villa Regina. Juan Bautista Bairoletto y Víctor Helmes abrieron fuego contra Ana Sferco de Nelli, de sólo 21 años, madre de una beba de cinco meses, confundiéndola en la noche con un policía. El crimen fue un estigma para el famoso asaltante.

La banda que se componía de Juan Bautista Bairoletto y Víctor Helmes, con varios secuaces más, venía azotando la zona de influencia de Villa Regina. Intentaron tiempo atrás asaltar a los pagadores del Ferrocarril Sur, sin lograrlo, en el paraje Julián Romero (20 kilómetros al este de Chichinales).
Luego hicieron lo propio con el comerciante Justo Fernández Flores en jurisdicción de Otto Krausse (una estación de cargas) del ferrocarril entre Villa Regina y Chichinales. Al anochecer de un día invernal de 1928, irrumpieron en el negocio de ramos generales de "Don Justo", como le llamaba la vecindad, quien estaba con un cliente. Los golpearon impiadosamente desvalijando el almacén, mientras que la esposa del dueño de casa, doña María Lorenzo, escapaba por una puerta del fondo, llevando en brazos a su pequeño hijo "Tito" hacia un asentamiento cercano, donde fue auxiliada.

Cruento episodio.

Pocos días después, Bairoletto, Helmes y sus secuaces fueron protagonistas del tal vez el más cruento episodio de sus carreras delictivas. Ocurrió el 28 de julio de 1928, al asaltar un almacén propiedad de una familia apellidada Muner, localizado en el lugar conocido como 3ra. zona, que fija el límite geográfico entre Villa Regina y General Enrique Godoy. El nieto de esa familia, Carlos Muner, trabaja en la actualidad como técnico en la emisora local Radio "El Valle". Era un negocio estratégicamente ubicado en un sector de chacras, en el que se avituallaban los moradores del lugar de todo lo necesario. Ese día era de un crudo invierno como no recordaban otro los pobladores de las incipientes localidades, ya llegada la noche, en el atraco que realizaron Bairoletto, Helmes y quienes los acompañaron resultó muerta -acribillada a balazos- Ana Sferco de Nelli, de solamente 21 años, muy vinculada a Villa Regina, ya que su hermana María Sferco era secretaria administrativa de la CIAC (Compañía Italo Argentina de Colonización), empresa fundadora de la localidad que llevaba el nombre de Regina Pacini de Alvear, la famosa diva mundial, esposa del presidente Marcelo Torcuato de Alvear. El esposo de la occisa, era José Nelli, a la sazón encargado de una proveeduría y que años más tarde presidió el directorio de la Sociedad Cooperativa "La Reginense", pionera en el cooperativismo de la región.

Cinco balazos.

El trágico suceso se desencadenó el día indicado, cuando Ana fue al almacén de Muner a realizar las compras, mientras que su esposo quedaba con la hija de ambos, de pocos meses de vida. La mujer se alumbraba con una linterna y así llegó al comercio. El asalto estaba en su clímax. Al ver aproximarse la luz y en la creencia de que podría ser un policía, los delincuentes abrieron fuego, recibiendo Ana cinco balazos que la mataron en el acto.
Este asesinato causó tremenda conmoción y consternó a la gente del lugar por lo cruento, la personalidad de la muerta y por haber dejado una bebita de solamente cinco meses de vida. Esa niñita es actualmente María Nelli viuda de Piccinini, madre de la actual secretaria de Trabajo de la provincia de Río Negro, abogada Ana  Piccinini y también de la jueza Liliana Piccinini, titular del Juzgado Correccional Nº 6, con asiento en Viedma, madre además de Mario Piccinini, comerciante de Villa Regina. Por su parte el viudo, José Nelli, formalizó años después otro matrimonio, del que nacieron varios hijos. Uno de ellos, Aldo, fue director de Comercio de la provincia, durante la gestión de Horacio Massaccesi. Fundó además con uno de sus hermanos una de las primeras industrias del país de jugos cremogenados. Lamentablemente por falta de apoyo oficial nacional y provincial (antes de su gestión) lo obligaron a cerrar. Otro hijo de Nelli está en el exterior, uno se mantiene ligado a administraciones y una hija está casada con un médico de Villa Regina.

Estigma para Bairoletto.

Este crimen fue un castigo para Bairoletto, un verdadero estigma que lo persiguió hasta el fin de su vida. Pues se dice que él no era criminal, sí su compañero de andanzas Helmes, calificado como individuo desalmado.
Bairoletto huyó a Mendoza, donde en Carmensa (jurisdicción de San Rafael) fue muerto -más bien fusilado- por fuerzas policiales de tres provincias (Río Negro, La Pampa y Mendoza) que lo buscaban afanosamente. Pero eso, es motivo para otra historia.

Publicado el 7 de setiembre de 2002 en el Diario "Río Negro".


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