miércoles, 31 de julio de 2019

INDIO EN LA MIRA por EMILIANO PICCININI.

A partir del pedido realizado al municipio reginense por el Juzgado Civil, Comercial y de Minería N° 1, donde la Justicia pide conocer la situación dominial de las tierras de la barda norte en las que se encuentra el monumento al Indio Comahue, la capilla Santa Teresita y el Aero Club reginense; se volvió a agitar el avispero en la ciudad, principalmente por el recuerdo latente de la inacción política que llevó al derrumbe de la vieja chimenea de la Fábrica Fioravanti, hace poco más de un año atrás.
El temor por la pérdida de otros símbolos locales, entre ellos el más representativo de todos, despertó el debate nuevamente. El monumento del Indio Comahue, se construyó en 1964 en ocasión a la realización de la Primera Feria Exposición Nacional del Comahue, un evento que mostraba a la región y el país el desarrollo potencial de nuestra zona.
La capilla fue construida por los primeros colonos mucho antes, en 1933, como protectora de las plantaciones que ante las inclemencias climáticas de la región los productores sufrían pérdidas constantes.
El hipotético -pero ya decretado remate- deviene de un reclamo surgido a partir de una causa iniciada hace una década atrás por Pablo Segovia, un arquitecto de Regina que tenía un compromiso de venta de las tierras pertenecientes a Francisco Iaria sobre la barda norte (donde se ubican las edificaciones mencionadas) para desarrollar un emprendimiento urbanístico (causa con fallo favorable a favor del arquitecto) pero no es él quien solicita el remate de las tierras.
Sino que la causa que decreta “rematar en subasta” los terrenos de alta barda corresponden al reclamo por el pago de los honorarios de los abogados que intervinieron en dicha causa entre el arquitecto y el propietario de las tierras, quien no abonó los honorarios correspondientes.
Carátula: ARIAS LUIS GUSTAVO y OTROS EN: «SEGOVIA PABLO C/ IARIA FRANCISCO S\ ORDINARIO» S/ EJECUCION DE HONORARIOS
Hacer click aquí para ver el expediente de la causa.
Hacer click aquí para ver los detalles del último proveído.
En la resolución dictada por la Dra María del Carmen Villalba fue desetimado el pedido de revocatoria contra el decreto que ordena la venta en pública subasta de los inmuebles embargados realizado por parte de la Dra. Marisa Gayone apoderada de Iaria. Es por eso que el juzgado exigió al municipio conocer la situación dominial de las parcelas.
Es oportuno aclarar, que tanto el Indio Comahue como la Capilla Santa Teresita fueron declarados monumentos históricos por la legislatura de Río Negro (2007) en los términos de la ley N° 3656 de Protección y Conservación del Patrimonio Cultural. A diferencia de la chimenea que sólo contaba con la declaración de monumento histórico por el Concejo Deliberante reginense, lo que permitió a los propietarios de las tierras, derribarla.
Las tierras son privadas, este es un punto en común con el caso Fioravanti. Entonces, ¿alcanza con la declaración de la Legislatura, o en este transcurso de tiempo algunos de los gobiernos municipales de turno deberían haber salvaguardado los monumentos a través de una sesión, donación, compra o expropiación de las parcelas donde se encuentran instalados?
La Ley N° 3656 emitida en el Boletín Oficial del 10 de Enero de 2008 dice en su Art 11 del Cap IV que determina una autoridad de aplicación de la presente ley que será la Agencia de Río Negro Cultura que tendrá a cargo su custodia, preservación y acrecemientamiento de los patrimonios culturales y naturales de  nuestra provincia. En el Art 21 del Cap VIII expresa que los poseedores o propietarios de los bienes muebles o inmuebles comprendidos en la presente Ley e inscriptos en el registro pertinente deberán ante cualquier modificación que pueda alterar sus condiciones comunicarse previamente a la autoridad de aplicación que tendrá un plazo perentorio para expedirse, fundamentando técnicamente la autorización o no de la modificación.
El municipio reginense presentará un informe técnico sobre la declaración de los monumentos ubicados en dichas tierras ha pedido de la justicia, el misterio y suspenso se sostendrá en el aire pero el debate a dar ya no debería ser sobre la situación de los monumentos que están salvaguardados por Leysino más bien por el usufructo privado de tierras que diariamente son utilizadas de manera pública por ciudadanos y visitantes para realizar diversos tipos de actividades, como también sobre la compleja situación a la que queda expuesta al Aero Club Reginense, institución social olvidada bajo la sombra del Indio en dicho litigio.

ANEXOS



Imágenes: Extraídas del Blog Bien de Regina. Cedidas por el Sr. Jose De Giorgio.
Colaboración: Walter Ventura.

domingo, 28 de julio de 2019

Victor Elmes: apogeo y final de uno de los bandoleros más buscados en Roca. Era uno de los secuaces del famoso Vairoleto, cuando Río Negro aún era un territorio. Mató a dos policías, estuvo preso, y protagonizó una huida de película antes de lo que se supone que significó su muerte.

Victor Elmes: apogeo y final de uno de los bandoleros más buscados en Roca.

Era uno de los secuaces del famoso Vairoleto, cuando Río Negro aún era un territorio. Mató a dos policías, estuvo preso, y protagonizó una huida de película antes de lo que se supone que significó su muerte.

POR MELINA ORTIZ CAMPOS.

Pocos años agrupan, según los registros, el apogeo y desenlace de la intensa vida de Víctor Elmes. Fue uno de los sujetos más buscados por la policía entre las décadas del ‘20 y el ‘30, cuando Río Negro era sólo territorio. En 1937 informaron que murió de varios disparos. Pero otros dijeron que partió mucho después, camuflado por años como un empleado más, en Roca.
De nacionalidad chilena, hay quienes afirman que no siempre fue “bandolero” e incluyen en su pasado los trabajos como peón y carrero. Pero su trayectoria se volvió prontuario y fue de asalto en asalto, hasta matar a dos policías en Cervantes y cerca de Catriel.
Ya venía ‘marcado’ como uno de los secuaces de Juan Bautista Vairoleto (escrito tal como el famoso bandido firmaba, aunque en algunos papeles figura como Bairoletto) , pero tanta osadía por su cuenta lo puso en la mira de las autoridades, que salieron a cazarlo, con los recursos que había.
Así y todo, detenido en Roca y enviado en tren a Viedma, allí también organizó un intento de fuga que los vecinos escucharon desde lejos, según las crónicas, por los 60 disparos que los guardias usaron para frenarlo.

Narciso y Macedonio, los caídos.


Con la fama concentrada en Vairoleto o Butch Cassidy, la figura de Elmes parece hoy ocupar un plano secundario. Pero sólo basta profundizar un poco para saber lo que generó.
El año 1932 lo puso en el semanario “Río Negro” como protagonista, cuando el 29 de marzo hirió de muerte a Narciso Vidal, el policía de 20 años que encabezaba el incipiente destacamento de Cervantes. El agente volvía de visitar a los hermanos Zamboni, que vivían en su jurisdicción, cuando vio pasar al bandolero junto a otros y sospechó. Conociendo sus antecedentes, le dio la voz de “¡alto!”, pero la reacción derivó en los disparos mortales.
Los esfuerzos por salvarlo no fueron suficientes y Vidal murió en el Hospital Regional de Allen, inaugurado siete años antes. Sus restos fueron inhumados en el cementerio de Cipolletti. “Solo, sin arma, sin experiencia, con un caballo viejo, así nomás con su coraje”, describió a Narciso el libro histórico de Hortensia Zamboni.
A modo de homenaje, el desaparecido club de fútbol “Urquiza” colocó una placa de bronce en el lugar del enfrentamiento, junto a lo que hoy es la Ruta 22. Actualmente es la chacra 316, que pertenece a Ana María Mosca, sobrina de los Zamboni, a 200 metros de la entrada a la localidad.
Hasta hace unos 10 años la fecha de la muerte se recordaba con flores, que dejaban allí las autoridades policiales. Pero en 2016 el municipio levantó la estructura para ensanchar la banquina. Prometieron reubicarlo, pero esa obra también está incompleta. Supuestamente lo guardaron en el Corralón de la comuna, pero hoy su paradero es incierto.
Similar fue la suerte de Reynoso, el “meritorio” que tenía a cargo el destacamento de Sargento Ocón, paraje cercano a Catriel. También en 1932, tiempo antes de lo ocurrido con Vidal, Macedonio visitaba el puesto de Flores, próximo al río, para esclarecer un robo.
Allí “fue atacado de imprevisto” por el bandido, que le disparó y luego huyó, según publicó “Río Negro”. El sepelio en la comisaría más cercana fue “un verdadero exponente de solidaridad”, muy concurrido por vecinos y autoridades.

Años violentos.



“Eran años difíciles y se vivía en continua zozobra. Se dormía con el arma abajo de la almohada. Se llevaba el revólver en el cinto”. Relata el libro de Zamboni.


En ese nivel de preocupación, el gobierno evaluaba crear una Gendarmería para sumar vigilancia donde aún no se habían consolidado las provincias.

Para Gabriel Rafart, profesor e investigador de la UNCo, ese clima cotidiano hacía que un atraco pudiera terminar de la peor manera. “El hecho de que en muchos asaltos ocurriera algún homicidio se debía a un escenario social donde víctimas y victimarios tenían las armas siempre listas para la autodefensa o la agresión”, analiza en su libro “Tiempo de violencia en la Patagonia”.
Hay que reconocer, en ese sentido, que nada era blanco o negro por aquellos tiempos. Así como algunos ciudadanos eran víctimas, otros ayudaban al “bandidaje”, por miedo o por conveniencia.
Lo mismo ocurría con la fuerza policial territoriana, que en 1932 sufría el recorte de fondos desde el Ministerio del Interior. Mientras algunos arriesgaban su vida otros engrandecían la peligrosidad del delincuente en sus informes, para ocultar alguna ayuda cómplice o colaboración, como sostiene Rafart. Tampoco faltaba el que sumara a los delitos cometidos, otros que no se pudieron probar.
Elmes, por su parte, supo hacerse llamar “Solano Rodríguez”, nombre falso que lo ayudaba a despegarse de sus antecedentes en tiempos de pocos documentos. Relatos orales lo recuerdan como un hombre “magro y de poca estatura, morocho”, según recopiló Julio Narváez,en el blog “Bien de Regina”, de Guillermo Pirri. Era caratulado como “bandolero” igual que otros tantos, fueran delincuentes amenazantes o no.

“El imaginario social acerca del bandido, era una construcción”. En un contexto de desigualdad, “denostaba a todos los actores que en algún aspecto mostraban sus diferencias con el orden del progreso” esclarece Rafart.
Diferenciado por la opinión pública de los gauchos y matreros que se valoraban casi como “héroes populares” en otras regiones del país, el bandido patagónico era sentenciado además como “pervertido” y “cobarde”.
Esa comparación ya se leía entre Elmes y Vairoleto: el segundo, solidario, distinto al primero, por ser “afecto a matar”, aunque integraran la misma banda.

Nada que perder, pero resistiendo.


Si algo se repite en las notas de archivo es la virulencia con la que representaban a Elmes cuando esquivaba ser arrestado.

“Perseguir y querer aprehender a un bandolero no era una empresa sencilla. Si no se entregaba a la primera voz de alto, la policía y los vecinos armados recurrían sin dilaciones al lenguaje de las carabinas”, explica Rafart.
Ese rechazo al calabozo se lee en las páginas de “Río Negro”, que inmortalizó el intento de fuga de Elmes de la cárcel de Viedma. Y Rafart lo amplía después, al reconstruir lo vivido en la vuelta a Roca, también como presidiario. En ambos, el bandido mostró hasta dónde podía llegar para defender su libertad.
El dato de un vecino lo delató en Roca, en abril de 1932, después de matar a Vidal. Lo encontraron escondido en un maizal de la chacra de David Cogan, residente de la Colonia Rusa. Retenido, según la policía, confesó seis robos, ambos homicidios policiales y una resistencia a la autoridad.

Muchos vecinos se acercaron a verlo a la comisaría, donde aseguran que conversó tranquilamente, con una “cínica sonrisa”.

Mientras tanto, Vairoleto seguía por su cuenta, alterando a los efectivos de El Cuy y Allen.
Otros tantos roquenses quisieron ver partir a Elmes desde la estación, cuando en tren lo enviaron a la cárcel de Viedma, ante la falta de un penal en Roca. Él seguía sereno:
“Si me porto bien y no logro escaparme antes, a los 15 años (de estar preso) es fácil que recupere mi libertad”, les dijo, sarcástico, anticipando lo que planeaba.
Aplicó su intento de fuga en la capital rionegrina el 18 de agosto de 1932, junto a otros dos internos, Rosamel Flores y Roberto Rojas, ambos condenados por homicidios múltiples. Aprovecharon una salida al patio, simulando lavar las tazas del desayuno, para revolucionarlo todo. Llegaron hasta el techo del edificio, pero tuvieron que desistir.
Hacia fines de octubre de 1937, la historia lo ubica de nuevo en Roca. Volvía con otros presos a la cárcel, en camión, después de pasar por el Juzgado. Según los relatos, esposado y todo Elmes logró tomar una hacha que usaban para cortar álamos y atacó a los vigilantes con el rodado en movimiento.
Tras el forcejeo con los guardias y los otros detenidos, logró bajarlos, tomar el volante y huir en dirección al río, mientras le disparaban a los neumáticos del vehículo. Con las ruedas en llanta, siguió el camino a pie, corriendo, hasta meterse a un canal que lo llevara al río, donde hallaron supuestamente su cuerpo luego, con dos balazos.
Los policías que le dispararon fueron llevados a juicio. El cabo Elías Arce fue sobreseído, mientras que el agente Harry Dix fue ascendido a cabo. El cadáver fue exhibido ante los vecinos, en el cementerio roquense. 
El caso parecía cerrado, pero ahí también nace el misterio. Pasados casi setenta años de su muerte, algunos vecinos de Roca todavía sostenían que...

“Falleció después de tener una vida sin sobresaltos, trabajando en una tapicería de la ciudad”.

Agradecimientos:

- Archivo Diario “Río Negro”.
- Rosalía Palermiti, Revista “Mirá Cervantes”.

- Gabriel Rafart, Neuquén. 

- Ana María Mosca, Cervantes. 

- Guillermo Pirri, Blog “Bien de Regina”.

- Hortensia Zamboni, Cervantes.

Publicado en Diario "Río Negro", domingo 28 de Julio de 2019.
Imágenes publicadas en el mismo medio.
https://www.rionegro.com.ar/victor-elmes-apogeo-y-final-de-uno-de-los-bandoleros-mas-buscados-en-roca-1051177/

martes, 23 de julio de 2019

Horacio Santangelo (Padre) con su Chevrolet 400 en la Vuelta de la Manzana.

La imagen es de los 1968/69 aprox.
Gracias por vuestros aportes.
A continuación datos aportados por Cacho Selva.
  • BAJANDO ..EL CERRO ..""CHAPELCO...""S.-M.- DE LOS ANDES...EL ""SORDO..VIEJO..""...DON HORACIO...ROMPIÓ LOS DOS EXTREMOS..DE DIRECCION....EL ""RUSO PACKER..""LOS ATO CON ALAMBRE..Y ASI HICIERON TODA LA BAJADA DEL...CERRO...Y ADEMAS.."EL VIEJO HORACIO"...ROMPIO LA PALANCA DE CAMBIOS.--""HICIERON TODA LA BAJADA..HACIENDO LOS CAMBIOS..CON UNA..PINZA EN EL AUTOMÓVIL CLUB..DE S.M. DE LOS ANDES..BAJAMOS..LA CAJA DE CAMBIOS...PARA CAMBIAR LA PALANCA...Y ARREGLAR TODOS LOS PROBLEMAS...EN 45..MINUTOS...ERAMOS LOS AUXILIOS...SAUKO...SLAUKO KRBAVCIC...PIRINCHO...DOMINGUES...MIGUEL CICCILOLI...Y YO .---SALIO EN LA REVISTA..COCHE...A LA VISTA..DE AQUELLA.EPOCA.-

domingo, 21 de julio de 2019

A 45 años del debut.de Atlético Regina en el torneo Nacional de 1974.

A 45 años del debut.de Atlético Regina en el torneo Nacional de 1974.Un día cómo hoy el Albo debutaba oficialmente en este torneo -21 julio 1974- enfrentando a Chacarita en condición de visitante.Gana 1 a 0 en un auspicioso debut. La portada del Diario Río Negro titula Sensacional debut en el Nacional. 
Atlético Regina formó con Galante, Correia, Liguori, Coll y Rivero, Trullet, Strack y Sánchez,Franco, Pasini y Flores. 
El jugador Pasini marcó el único tanto del encuentro.La crónica del matutino destaca la labor del debutante el volante Óscar Trullet junto va Juan Enrique Strack y la buena labor en defensa, destacados Coll y Rivero. 
Otro acontecimiento fue que en Chacarita debutó Claudio Óscar Marangoni como mediocampista por la derecha.
Boca arrancaba goleando a Banfield.
Este torneo lo ganaría San Lorenzo de Almagro y también donde se produciría otro hecho deportivo inédito.
En la duodécima fecha -6 octubre- Banfield le gana 13 a 1 a Puerto Comercial de Ingeniero White y Juan Alberto Taverna marcaba 7 goles. Récord en el fútbol profesional.
Crónica del libro Momentos Inolvidables del fútbol Regional (2016) de Darío Buonaventura. 
Publicado en face de Darío Buonaventura.
Cuadro de imágenes: ¡BIEN DE REGINA! sobre imágenes de Buonaventura. 

lunes, 8 de julio de 2019

8 de Julio de 1926: El Ingeniero Agrónomo, Ferdinando Ferravante, informa desde Trento (Italia) sobre la posibilidad cierta del envío de un grupo de familias italianas.-

8 de Julio de 1926.

El Ingeniero Agrónomo, Ferdinando Ferravante, le informa al Director Técnico de la C.I.A.C. -desde Trento (Italia)-sobre la posibilidad cierta del envío de un grupo de familias italianas -dispuestas a viajar -para la Colonización de este Centro Agrícola.
Estos párrafos fueron escritos en Italia, por el Ing. Ferravante en nota dirigida al Ing. Bonoli, que tuve a la vista, y dice: "El reclutamiento de familias para las regiones transoceánicas está llena de obstáculos, que tienen como centro principalmente la desconfianza que se desarrolló por parte de los Colonos.
Anteriormente por varias circunstancias de tiempo y lugar, las cosa era facilísima; ahora las cosas han cambiado completamente.
Francia, debido a su proximidad absorbe toda la inmigración agrícola italiana.
Las empresas de colonización intentadas hace poco por sociedades de Chile, Brasil y Méjico, que luego han fracasado clamorosamente, han alimentado el descrédito, y una tenaz desconfianza casi en todas las partes".

* Se transcribe Efemérides Reginense del libro "Historia de Villa Regina y sus memorias" de Franco González, página 216.

Presentación del libro del Reginense Carlos basabe: "Vasco... sudaca y mallorquín".

Del face de Carlitos Basabe 8 de Julio de 2017.