PRÓLOGO.
Carlos Basabe Cerdá nació en una población al norte de la
patagonia argentina en julio de 1940, su primera vivienda fue una chabola o
rancho que se asentaba sobre terrenos fiscales donde los vecinos eran todos
operarios o jornaleros que trabajaban el campo, la construcción o los
aserraderos. Villa Regina se inauguró como población de inmigrantes Italianos y
Españoles en su mayor porcentaje, y el sacrificio de desmonte, emparejamiento y
trazados de acequias de riego, fue titánica para poder convertir esos páramos
desérticos en tierras productivas.
16 años después de haber sido declarada población, Carlos
nació en una muy humilde vivienda sin luz, agua, ni servicios básicos. el alumbrado era con lámparas a kerosene, la
calefacción y fogones de cocina eran alimentados a leña, y el agua se recogía
de un canal de riego que pasaba enfrente.
Su niñez de chico pobre le obligó a crear sus propios
juguetes recogiendo deshechos de un basural propiedad de una fábrica tomatera
que estaba a unos 500 metros de distancia.
Paralela a una ruta nacional de tierra y pedregullo corría
la vía del Ferrocarril General Roca que cumplía con el transporte de frutas,
petróleo, piedra de alabastro, soda cáustica y otras especies del Valle a
Buenos Aires (1.200 kilómetros) además de una formación diaria de transportes
de pasajeros hacia el mismo punto.
La manipulación de elementos naturales para entretenimiento,
el paso por la escuela primaria y la integración al trabajo con apenas 8 años,
hace que multiplique la imaginación y la curiosidad por todo lo que se
necesitara para vivir. De esa manera
fue cambiando de trabajos que no tenían nada entre si, "cadete de
almacén", cadete de farmacia con 12 años, lo que no impidió que el
farmacéutico viendo la curiosidad, le dio la oportunidad de que elaborara
algunas "recetas magistrales" que se usaban en esa época.
Así fue que se
encargó de hacer una crema con productos pesados en una minúscula balanza de
pocos gramos, llamada "diadermina", también se encargaba de hacer un
laxante llamado "limonada rougé" supositorios y otras recetas. De la farmacia pasó a ser repartidor de
telegramas en una bicicleta del correo (el medio de comunicación más rápido de
la época), trabajó en aserraderos armando jaulas y cajones de madera para
embalar las frutas que viajaban a Buenos Aires, fue repartidor de helados, vendedor
de caramelos en un cine, ayudante de carnicero y de allí pasó a su oficio de
pintor rotulista que conservó durante 55 años.
La diversidad de trabajos y la permanente curiosidad por la
vida lo hizo cantante de temas bailables y luego guitarrista, cantante de tangos y folklore, llegando a ser
representante de Villa Regina en escenarios Nacionales.
El cariño a la naturaleza y la sensibilidad por la familia y
los amigos, le inspiran elaborar versos y cuentos cortos que hoy se ponen a
consideración de quienes los lean. No son poemas de gran elocuencia gramatical,
pero se puede apreciar que trata de describir con todo cariño los personajes y
paisajes que relata.
Para entender su amor a Villa Regina, debemos saber que es
una población emergente al pié de una barda o meseta recostada en la parte
norte, siendo además la puerta al Alto Valle de Río Negro, un corredor frutícola
de 100 kilómetros de largo por unos 6 o 7 kilómetros de ancho.
Sobre la parte sur, corre el Rio Negro producto de la
confluencia del Rio Limay y el Río Neuquén
toda esa masa de tierra está sembrada de frutales que son la mayor
riqueza de la zona. Manzanos, perales,
ciruelos viñas, duraznos o melocotón, nectarinas o pelones son una parte de las
variedades que se mezclan con sembradíos de verduras, alfalfa, y otras
especies.
Los que cruzan el
tramo desde Bahía Blanca hasta la entrada al valle, pueden ver solamente
tierras estériles y semidesérticas por lo que al llegar al alto valle se
sorprende del vergel que acompaña la ruta nacional 22 hasta la provincia del
Neuquén.
Desde 1981, se afinca en Palma de Mallorca (capital de las
Islas Baleares de España) para quedarse definitivamente con su familia y es por
ese mismo motivo que empieza a enamorarse de las bellezas isleñas. Cada tanto
cuando está motivado, escribe un poema o un cuento corto para descargar su
creatividad, las mismas que hoy ocupan este pequeño ejemplar.
Estas primeras letras reunidas en versos, están dedicadas a
Mirta Doyle (su esposa) en ocasión de cumplir las bodas de oro.
ANIVERSARIO.
Anoche te he vuelto a
tener entre mis sueños
con aquella juventud
exuberante
eras un arroyo de
adolescencia cristalina
corriendo por un
cauce desafiante
fue solo un flechazo
en nuestras vidas
aquel hermoso
encuentro de verano
mi corazón quedó
herido de muerte en ese instante
como un pájaro
alcanzado por un rayo
¿que puedo recordarte
que no sepas?
en estos cincuenta
años que han pasado
transitando los dos
juntos el camino
que nos puso la vida
en nuestras manos
¿que pronto que ha
pasado esta aventura
o quizá, muy a prisa
la bebimos
parece que fue ayer
cuando empezamos
a sortear las espinas
del camino
hoy estamos mayores y
felices
sin especulaciones,
con las cartas dadas vueltas
entregados el uno
para el otro
somos dos llaves de
una misma puerta
¡quiero darte las
gracias por tu apoyo!
y lo mucho que te he
amado en esta vida
si volviera a nacer
solo pretendo
volver de nuevo a ese
punto de partida
Una vida llena de altibajos, alegrías y malos momentos
encapsularon la historia de este matrimonio que lleva 54 años de vida
compartida. Yendo y viniendo hacia
diferentes sitios, buscando siempre una estabilidad que garantice la mayoría de
edad resumidas en unas pocas estrofas donde el autor deja bien claro su amor
por su mujer.
POLICROMÍA.
Cromados de ocre y oro, los álamos plateados
se perfilan desnudos, junto a aquel viejo rio
separador de vientos, en las chacras vallistas
cantaban junto al céfiro, las notas del estío
hermanos de los sauces, panorámica antigua
sombrean los solares de la costa vaguada
le dan encanto joven, a la isla elegante
la que Gonzales Jezzi, con pasión instaurara
vigilan con ternura, a niños bullangueros
que corren por el pasto detrás de una pelota
ascuas en la parrilla, humeando la asadura
saludan con aplomo, el nacer de la aurora
a lo largo del rio caudaloso y señero
son la policromía de las tardes de otoño
entre el ocre y el rojo, se mezclan los colores
cuando ya se desprende de su verde visoño
en momentos puntuales, los álamos plateados
sirvieron de cumbrera en los humildes ranchos
o fueron combustible, de cocinas a leña
en las heladas noches de los inviernos largos
hoy regreso y los miro, con ojos asombrados
los llevo entre mis fotos, como testigo magro
a mostrar en españa, que allá del otro lado
Dios existe y disfruta, de esos hermosos árboles.
El valle de Rio Negro ocupa una extensión de unos 100
kilómetros de largo por unos 10 kilómetros de ancho, sobre la parte sur corre el Rio Negro que es
producto de las confluencias de los ríos Limay y Neuquén. Antes de que se
creara la represa de "El Chocón", estos ríos eran libres de caudal y
en la época del deshielo al iniciarse la primavera desde el mes de septiembre,
solía desmadrarse y sus aguas inundaban las riberas donde estaban las chacras
de frutas a lo largo de esos 100 kilómetros.
Como consecuencia de esas grandes inundaciones, también sufrían las
consecuencias los habitantes ribereños.
Estos versos tratan de definir esa costa sembrada de árboles naturales y
otros plantados a posta para ayudar a atajar los vientos que hacen caer las
frutas. Los tonos que toman en otoño es
un sueño que dificilmente se pueda olvidar en la vida.
14/11/2017.
Carlos Basabe Cerdá nacido el nueve de julio de 1940. Vive
en Palma de Mallorca, Isla Baleares (España).
Pedro Basabe (mi padre), me desperté y se me vino el
recuerdo de cuando éramos niños, (mi hermano Pedro 7 años, yo 5 y mi hermano
Ricardo pocos meses durmiendo en una jaula tomatera. Cosechábamos tomates para un tal
"Menegon" en una chacrita antes de llegar a Godoy, nos pagaban 25
centavos la jaula, juntábamos entre mi hermano y yo 5 jaulas al día. Llegada la media tarde parábamos a tomar mate
cocido con galleta, que mi querida mamá lo preparaba en la cabecera de los
surcos y allí con cuatro jaulas de asiento nos reuníamos para contarnos los
descubrimientos del día. (Alguna vez volvimos caminando a Regina) Hoy es uno de
los tantísimos recuerdos que lleva mi alma romántica. (Descansen en paz mamá y
papá). Carlos Basabe.
Fotos varias.
Realizado por Carlos Basabe. |
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